ABALO ALONSO ARQUITECTOS – Berbés UVigo

Estudio: ABALO ALONSO ARQUITECTOS
Categoría: Premio A+by Daikin al mejor proyecto de Arquitectura Sostenible
Proyecto: Berbés UVigo

Descripción del proyecto

 

La universidad de Vigo, cuyo campus principal se encuentra a 10km del centro urbano, propone la rehabilitación de tres construcciones en el casco histórico con el fin de acercar su actividad al resto de la sociedad.

Un volumen de madera se apoya en los soportales de piedra, únicos restos existentes, con parte de las fachadas y muros medianeros, de las construcciones previas. Una caja dentro de otra; madera y piedra. En este caso, la caja de madera es entera de madera; estructura y construcción incluidas. Pero con sistemas industrializados contemporáneos, que optimizan el uso del material y su respuesta temporal. Nos inspiramos en la construcción naval, pero incorporamos los últimos avances disponibles en i+d, como corresponde al destino del edificio que pretendemos desarrollar.

La elección del material y su sistema constructivo nos permite integrarnos en la tradición local sin renunciar a cierta dosis de contemporaneidad. En el alzado oeste restauramos los soportales de piedra y las partes de fachada del mismo material que todavía se conservan. Los arcos nos sirven de apoyo a la nueva construcción, cuya cimentación se completa con micro pilotaje en la zona central, losa en parte del perímetro y roca directamente en la parte posterior. Antes de los sucesivos rellenos portuarios nos encontrábamos aquí al borde del mar, por lo que geológicamente el terreno es complejo.

Utilizamos tres criterios de intervención en las fachadas en función de las construcciones originales. La ubicada más al norte se reconfigura, reutilizando sus propias piedras, para adaptar una entreplanta previa particularmente baja. La central se refuerza y completa con una nueva cornisa de piedra similar a la existente. Y en la tercera se restauran con mayor delicadeza los revocos con azulejos insertados.

La altura permitida por el plan especial se completa, en la fachada oeste, con una celosía de pilares de madera laminada que integra estructura, protección solar e imagen en un solo elemento, con la verticalidad sugerida por la normativa y la impronta de un edificio institucional como el que nos ocupa. La fachada este, incrustada entre las plazoletas, patios y callejuelas interiores, se resuelve de una manera similar, algo más aligerada por la reducción del impacto solar.

Se agota la volumetría prevista en la normativa, rematando el conjunto con tres cubiertas longitudinales a cuatro aguas, de zinc, perforadas en la zona central con dos lucernarios que inundan de luz norte el interior. La estructura de estas cubiertas se resuelve con correas de madera laminada a par hilera. Para evitar la aparición de tensores en la zona central que, por su número, casi darían la impresión de falso techo continuo, se refuerzan los muros medianeros de madera contra laminada con contrafuertes del mismo material, colocados por el exterior aprovechando el adelgazamiento de los muros de piedra originales por un lado y el patio por el otro.

Los forjados se resuelven también con madera contra laminada, suelo técnico compacto y pavimento de pvc flotante. Se completan en determinadas zonas con techos acústicos semi directos. Las alturas originales, que el plan especial conserva, son más propias de vivienda que de edificio dotacional, por lo que evitamos en la medida de lo posible la aparición de falsos techos, dejando las instalaciones vistas o ubicándolas en los huecos existentes en las medianeras.

Un recorrido central abierto enlaza los soportales con la planta primera a través de unas gradas de hormigón para continuar con dos tramos de escaleras exentas de madera que conjugan las geometrías del solar.

Programa funcional flexible con espacios de trabajo, reunión, exposición, información o enseñanza, que se distribuyen en los diferentes niveles. Del antiguo parcelario, cuya huella se conserva, el volumen más pequeño contiene los espacios servidores: escalera protegida, aseos, conductos e instalaciones, pero también una sala de reuniones cerrada en cada una de las plantas superiores. El resto se distribuye en los otros dos volúmenes, con una zona institucional en la fachada principal de la planta primera y algunas aulas ya configuradas en la segunda.

¿Qué hay más sostenible que reutilizar el patrimonio construido, reduciendo la generación de residuos o la extensión de la superficie construida?

La clasificación energética es A, pero las estrategias de sostenibilidad y responsabilidad ambiental van más allá de una óptima elección de los sistemas activos. Refuerzo del aislamiento de lana de roca, aumento del mismo en los huecos al utilizar vidrio triple con doble cámara, ventilaciones cruzadas o protección solar de la fachada más expuesta, la oeste y principal en este caso, completan una gama de estrategias pasivas encaminadas a reducir el consumo energético.

Pero el sistema constructivo también colabora en este caso. Los 380 m3 de paneles de madera contra laminada empleados en la estructura principal del edificio fijan 380 Ton CO2. Se emiten 23 toneladas durante la fabricación de los paneles y su transporte optimizado emite otras 16, por lo que podemos considerar 341 las toneladas netas de CO2 fijadas por los paneles CLT. 37 min es el tiempo requerido por los bosques, austríacos en este caso, para producir la madera consumida en el proyecto. En 2019 las emisiones per cápita de CO2 en España fueron 6,6 t CO2/habitante, por lo que las 341 toneladas de CO2 fijadas por los paneles CLT equivalen al CO2 emitido durante ese año por 52 españoles.