El proyecto de Clínica de recuperación y superación deportiva para Breakers -ubicado en Valencia, España- es un espacio concebido para acompañar al paciente en la readaptación de lesiones. Desde la fase más aguda del tratamiento hasta la vuelta a la actividad física y fortalecimiento. Medicina y deporte se fusionan en un mismo espacio.Esta clínica debía basar su actividad en dos campos principales: la medicina (fisioterapia y traumatología) y el deporte. Esta condición fue el punto de partida para proyectar un espacio único en el que ambas disciplinas interactúan constantemente y los pacientes pueden ser atendidos con la más alta calidad y profesionalidad en su proceso de recuperación.El proyecto transforma un local, que se encontraba totalmente vacío y abandonado, en un espacio dedicado a la salud y al cuidado personal.La geometría del local y la disposición de su estructura vertical es muy irregular. No existe ninguna métrica ordenada. Con el proyecto se trata de regularizar el espacio mediante el diseño de unos volúmenes, a modo de cajas, que se integran en la disposición de los pilares preexistentes y albergan las distintas salas del centro.Para la materialización de estos volúmenes, se emplea una chapa metálica en formato mini onda que reviste los paramentos y un material de resina en los pavimentos. Ambos materiales, con una tonalidad neutra y una estética limpia, conforman la base material del proyecto y contrastan con la textura de los pilares preexistentes de hormigón, las carpinterías interiores de madera y el mobiliario de acero inoxidable.Además de la parte material, el proyecto reflexiona en torno a las necesidades de un nuevo concepto de Clínica médico-deportiva: un espacio dinámico y flexible que lo aleja de un centro deportivo convencional. Para ello, se plantea una serie de paneles móviles de madera que permiten configurar el espacio y hacerlo cambiante, modificando la distribución y la superficie de la sala de recuperación según las necesidades del momento. De esta manera, según si los paneles están abiertos o cerrados, delimitan nuevos volúmenes que se emplean como boxes de tratamiento o se abren para ceder su superficie al espacio principal.Todos estos recursos consiguen crear una experiencia espacial que coincide con el espíritu de la marca Breakers, que ha logrado posicionarse como referente en el sector médico-deportivo.
