REHABILITACIÓN Y AMPLIACIÓN DEL AYUNTAMIENTO DE FUENTES DE ANDALUCÍA (SEVILLA)La villa de Fuentes se asienta en la campiña sevillana en pleno valle del Guadalquivir. A su riqueza cultural y monumental fruto de asentamientos de todas las épocas, se une la paisajística y su histórica relación con la agricultura.En su antigua calle Mayor se encuentra su espacio público más representativo, la Plaza de España, que alojó entre otros el primitivo Ayuntamiento. En el siglo XVIII y tras su ruina en el terremoto de Lisboa, un Consistorio de nueva traza neoclásica se levantó según proyecto del arquitecto madrileño Ventura Rodríguez, modificando una primera propuesta inicial de gusto más barroco de los alarifes fontaniegos Alonso Ruiz Florindo y Andrés de Carmona.Las obras de Rehabilitación y ampliación comprenden la intervención sobre este conjunto edificado, otros más recientes de escaso valor y una serie de vacíos intermedios. Todos situados en un entorno catalogado donde se intercalan el antiguo Castillo, el Convento de San José o la Iglesia de Santa María. Pero debido a las diferentes crisis económicas y a los tiempos de pandemia, el encargo acabó adaptándose a un presupuesto mínimo y a necesidades reales. Restaurar el edificio histórico, diseñar su conexión con varias estructuras más recientes detrás de él y cerrar el programa funcional del nuevo complejo resultante.La estrategia de la memoria.La intervención resuelve el nuevo programa uniendo el edificio del siglo XVIII y el más reciente de servicios municipales con un nuevo volumen que permite la lectura única de todo el conjunto. Tras demoler las edificaciones de menor valor, el nuevo edificio completa la manzana y se presenta a la calle de una forma hermética, sin orden ni huecos que permitan adivinar el programa público que acoge su interior. Frente a esta masividad, el edificio va escalonándose sutilmente en sección conforme asciende a su cubierta, acordando un mejor encuentro con la fachada histórica, y resultando a la vez un hallazgo de ligereza que se contrapone a su masividad inicial. La disposición del programa se presenta con gran claridad. Una vez atravesado este nuevo zaguán de entrada, un claro espacio de recepción y atención queda conectado con un nuevo espacio público al aire libre que funciona como extensión de la estrecha calle de acceso. Este vaciado interior permite recuperar la fachada trasera del edificio histórico y en consecuencia la condición exenta original del mismo. Esta planta baja pública ajusta el acuerdo entre sus distintos niveles y la calle conectando los recorridos de todo el conjunto. Por otro lado, la planta superior se dispone como espacio de trabajo, conectándose a un lado con el área administrativa y al otro con el área técnica. El impacto con el edificio histórico se reduce al mínimo, donde una secuencia con patios y una doble altura permiten preservar el contacto entre ellos. El carácter público y abierto de la Institución se refuerza con la propuesta de acceso a sus cubiertas. Enclavados dentro de este entorno protegido, la propuesta apostó por dotar a este espacio de un carácter visitable. Recorridos que se conectan con la tradición de torres-campanarios y miradores de la Villa que se elevan en numerosos puntos del casco para disfrutar de su paisaje agrícola circundante y de su caserío.Materialidad y territorio.La honestidad constructiva y austeridad ornamental del edificio de Ventura Rodríguez, nos llevó a concentrar la intervención en recuperar el carácter elegante y sobrio de sus soluciones constructivas y espaciales. Se resuelven sus patologías constructivas, restaurando los elementos en mejor estado de conservación, respetando el legado y redescubriendo su transformación.Mediante el uso de los materiales y de las técnicas constructivas se establece un puente de unión entre pasado y presente. En este sentido, gran parte de la materialidad del conjunto se ha confiado a revestimientos de mortero de cal natural que incorporan, en el caso de sus fachadas, semillas y trazas vegetales que evocan la relación histórica del municipio con los cultivos y su agricultura.Piedras naturales, maderas, metales nobles y un tratamiento de la vegetación propio de nuestra latitud, terminarán de construir y recordar en todo el conjunto el carácter público de esta histórica Institución.
