La Casa 27x13 es un proyecto de reforma interior de una vivienda de 90 m2 ubicada en un edificio plurifamiliar en la que se ha empleado como elemento vertebrador de la propuesta la rasilla cerámica —serie Montserrat procedente de Cerámicas Calaf, S.A.—.La pieza cerámica de 27x13 cm —dimensión de la que toma nombre el proyecto— actúa como leitmotiv métrico, compositivo y constructivo que ordena el espacio, soluciona elementos arquitectónicos que se rehabilitan y establece la transición entre los espacios interiores y exteriores.El módulo característico de 27x13 cm se emplea para crear una retícula que articula las piezas estructurales preexistentes de la vivienda —estructura vertical, molduras— con los nuevos espacios que se proyectan a través de esta métrica. Además, el elemento cerámico se emplea para resolver otros aspectos —no menos importantes— como la transición entre interior y exterior al emplearse como pieza única de pavimento también en los espacios exteriores. La estancia principal de salón, comedor y cocina vuelca a un espacio exterior donde el límite se resuelve combinando la rasilla con una carpintería corredera de aluminio enrasada al nivel del pavimento. La carpintería está compuesta por tres hojas correderas que, al abrirse, se ocultan en un cassette integrado en el trasdosado de fachada. El resultado, es un espacio continuo donde desparece el límite entre el exterior y el interior, fomentando la ventilación natural de la vivienda y reduciendo la demanda energética de manera pasiva en las estaciones cálidas. Además de esta transición, la rasilla cerámica completa su uso integral en el proyecto empleándose como elemento constructivo para resolver y rehabilitar los alféizares del resto de ventanas de la vivienda que se hallaban muy deteriorados. Al tratarse de un material absorbente, en todas sus aplicaciones en la vivienda, se añade una última capa de acabado consistente en una protección ecológica en base acuosa, transpirable e hidro-oleo repelente que respeta el aspecto natural del material y lo protege contra sustancias orgánicas.La rasilla también colabora con las estrategias de diseño pasivo y ahorro energético a través de sus propiedades térmicas. En el estudio previo sobre el estado inicial de la vivienda, se observó que los huecos de fachada de las estancias principales están orientados a Sur y cuentan con voladizos cuyas dimensiones son capaces de detener la radiación solar en el interior de la vivienda en verano —posición alta del Sol, entre 51º y 74º sobre el horizonte— y permitir su paso en los meses de invierno —posición baja del Sol, entre 27º y 51º sobre el horizonte—. Esta situación favorable, combinada con la masa térmica de la rasilla, permite calentar las piezas en los meses de invierno consiguiendo aportaciones caloríficas en el interior de la vivienda y mantener las piezas frescas en los meses de verano al no incidir la radiación sobre ellas.En definitiva, el proyecto trata de emplear en su parte formal una pieza tradicional y esencial de la arquitectura mediterránea, desde una perspectiva contemporánea que se apoya en referentes de grandes maestros como Coderch —que sin abandonar un fuerte arraigo en la tradición mediterránea, provocaron grandes cambios en las soluciones— y en el espacio miesiano —donde los despieces del pavimento juegan un papel imprescindible en la definición de la arquitectura—.
