Can Carol es un símbolo para los vecinos del barrio de Vallcarca. Se trata de una antigua masía del S.XIX vinculada a su pasado rural. El edificio se encontraba prácticamente derruido; únicamente quedaban en pie las fachadas y algunos muros principales. Tras largas reivindicaciones, en 2015 fue adquirido por el ayuntamiento con el objetivo de convertirlo en un equipamiento sociocultural autogestionado por las entidades del barrio.Los muros que todavía se conservaban delimitaban tres áreas que coincidían con las superficies principales del programa: una sala polivalente, un paquete de aulas/taller y una pequeña cantina; al mismo tiempo nos revelaban las fases constructivas del edificio.La intervención aborda la transformación de la ruina en equipamiento preservando su memoria histórica pero sin caer en la restitución. La rehabilitación parte de la estructura y resuelve a través de un único material, la madera, la estabilidad, el aislamiento y el acabado interior de los nuevos espacios, en un gesto que aúna sostenibilidad, economía y expresividad.Los muros exteriores han sido rehabilitados mediante técnicas y materiales tradicionales. Por el interior, una nueva estructura autoportante de CLT estabiliza las antiguas fachadas y resuelve el cerramiento y acabado interior en una misma hoja. Únicamente en el “espacio atrio”, en contacto con la medianera posterior, los muros de mampostería se muestran vistos haciendo patente la condición interior / exterior de este nuevo espacio bioclimatizado que se utiliza para mejorar el confort y reducir el consumo energético.